Para resolver un problema matemático correctamente, independientemente del nivel que tengas o del curso en el que estés (primaria, bachillerato, etc.), es necesario tener en cuenta algunos factores que vamos a detallar en este artículos.
Recuerda que aprender a resolver problemas es fundamental, pues son parte de los conocimientos que se deben adquirir para obtener el título obligatorio (además de que entender las matemáticas resultan muy útiles en el día a día – más información).
Cualquiera que quiera aprobar, ante todo, debe entender cómo se abordan los problemas, puesto que son uno de los ejercicios básicos de las matemáticas.
Con motivación, compromiso y algunos consejos, te aseguramos que lo conseguirás.
Atiende en clase
Por regla general, las pruebas que tendrás que resolver reflejarán lo explicado en clase por tu profesor, pues la intención es evaluar si los alumnos han entendido los temas impartidos en clase para poder seguir adelante con el temario.
Considerando lo anterior, los siguientes consejos te vendrán de perlas:
- Presta atención en clase;
- Haz preguntas útiles para disipar cualquier duda;
- Tras las clases, vuelve a leer tus apuntes para comprobar que los hayas entendido;
- Apréndete de memoria las definiciones y reglas más importantes (por ejemplo, el Teorema de Pitágoras);
- Haz un resumen de lo aprendido para que se te queden mejor los conceptos.
Explora otros métodos didácticos
Si bien es cierto que tienes que prestar mucha atención a lo explicado en clase, no siempre un profesor puede resolver las dudas de todos los alumnos, pues tiene un temario que respetar y no puede detenerse demasiado tiempo en cada contenido.
Si algo no te queda claro, no lo dejes pasar, pues tarde o temprano necesitarás aplicarlo para resolver algún problema.
Una opción es que busques a un profesor particular, aunque, debido al elevado coste, lo normal es que solo podrás recurrir a las clases particulares en ocasiones puntuales.
Afortunadamente, con la llegada de Internet sobran las opciones gratuitas que te ofrecen datos adicionales. En este caso el problema es encontrar páginas que nos brinden información exhaustivas y bien explicada.
Aquí es cuando entra en juego Videoteca Matemática. En nuestro canal de YouTube, así como en nuestra web, encontrarás múltiples vídeos para todos los niveles (primaria, ESO, bachillerato, educación para adultos, PAU y PACFGS). Verás que tanto en YouTube como en la web dispone de una sección (o bien, lista de reproducción) para cada tema (ej. ecuaciones, logaritmos, probabilidad…). En cada sección encontrarás tanto vídeos explicativos como vídeos dedicados a la resolución de ejercicios.
Y no se acaba aquí; si, tras ver los vídeos, te quedas con alguna duda, ¡consúltanosla! ¿Dónde hacerlo? Lo ideal sería que entrarás en nuestro grupo de Facebook, creado a posta para resolver cualquier duda que pueda surgir; sin embargo, también contamos con una página de Facebook, un perfil de Instagram y, cómo no, podrás dejarnos comentarios en los vídeos de nuestro canal de YouTube.
Cuánto más problemas resuelvas, mejor se te dará
Aunque parece obvio, es uno de esos consejos que muchos alumnos pasan por alto (a menudo por falta de ganas); sin embargo, esforzarse más al principio, ejercitarse e intentar resolver cuanto más problemas posibles, dará sus frutos.
Tras tanto problemas similares, resolverlo será algo automático y tanto los deberes como los exámenes se convertirán casi en una de las numerosas tareas rutinarias de tu día a día.
¿No te lo crees? Inténtalo y ya verás como tus esfuerzos tendrán recompensa.
Sin contar que mejorarás tu capacidad de memorización y análisis, incluso en otros ámbitos.
¿Cómo resolver un problema matemático?
Teniendo en cuenta lo anterior, vamos a ver ahora cómo deberías enfrentarte a un problema matemático paso a paso.
1- Antes de comenzar a resolver un problema, debes comprenderlo
Sea cual sea tu nivel y la dificultad de la prueba a resolver, el principio es el mismo, así que ¡toma nota!
Un problema matemático no es otra cosa que una pregunta en la que aparecen tanto elementos desconocidos (incógnitas) como conocidos; estos últimos elementos, junto con el enunciado, serán lo que te ayudarán a entender el procedimiento a seguir para resolver el problema en cuestión.
Si las matemáticas no son tu punto fuerte y te consideras más de letras, te aconsejamos que pienses en él como si fuera un caso detectivesco: dispones de cierta información (enunciado), una o más pruebas pero resultan ser insuficientes para un juicio, por lo que tendrás que buscar más (incógnitas). El caso se cerrará cuando encuentres las evidencias necesarias.
Un truco, en estos casos, es intentar reformular el problema con tus palabras, pues seguramente te resulte más fácil comprenderlo y focalizarte en lo que haga falta para su resolución.
2- Tómate tu tiempo y procede paso a paso
Ordena tu escritorio dejando solo lo imprescindible a mano (ej, cuaderno, boli, regla, calculadora…)
Vuelva a leer el enunciado las veces que haga falta y apúntate todos los datos proporcionados.
Recuerda no pasar nada por alto: todo lo que aparece en el enunciado te servirá para resolver el problema.
3- No te limites a encontrar un solo procedimiento: prueba diferentes hipótesis
Es lo que haría un detective, ¿no?
Si lo piensas, es lo más lógico frente a algo que no sabemos: evaluar las diferentes opciones, probar y volver a probar, hasta dar con la solución correcta.
Si crees haber dado con el procedimiento a seguir, te aconsejamos que eches un vistazo al siguiente step.
4- Verifica los resultados
¿Estás seguro de que los resultados son correctos?
Aunque haya dado con el procedimiento a seguir, puede que te hayas equivocado en los cálculos. Es algo que nos pasa a todos y más a menudo de lo que puedas imaginar pero sería una faena fallar un examen por un error de calculo.
Coge tu calculadora y vuelve a revisarlo todo: aunque tardes un poco más, valdrá la pena.